Si, ya sé que suena muy mal esta palabreja, sin embargo, no es tan complicada como parece. Una cosmogonía es simplemente una doctrina sobre el mundo, que da cuenta del origen de todo lo que existe. Dicho de manera más clara y sencilla, simplemente se trata de una explicación del origen del universo.
Todos los sistemas de pensamiento, sean filosóficos o religiosos, tienen su propia explicación de los orígenes. El cristianismo no es una excepción y también la tiene y la encontramos en los primeros capítulos del libro del Génesis.
Estos capítulos son fundamentales para poder entender por qué el mundo es como es y cómo hemos llegado a la situación en la que nos encontramos en estos momentos.
Desde el principio siempre ha habido un gran debate acerca de si los primeros capítulos de Génesis son históricos o no. La comunidad cristiana, durante siglos, ha estado dividida, y continua estándolo, al respecto. No pienso entrar en esta polémica. Mi postura es que los contenidos son históricos pero expresados en lenguaje literario, no en lenguaje histórico. Ahora bien, entiendo y acepto otras posturas.
En resumen, es imposible tener una visión cristiana del mundo sin comprender los contenidos de estos primeros capítulos del Gran Libro.
Todos los sistemas de pensamiento, sean filosóficos o religiosos, tienen su propia explicación de los orígenes. El cristianismo no es una excepción y también la tiene y la encontramos en los primeros capítulos del libro del Génesis.
Estos capítulos son fundamentales para poder entender por qué el mundo es como es y cómo hemos llegado a la situación en la que nos encontramos en estos momentos.
Desde el principio siempre ha habido un gran debate acerca de si los primeros capítulos de Génesis son históricos o no. La comunidad cristiana, durante siglos, ha estado dividida, y continua estándolo, al respecto. No pienso entrar en esta polémica. Mi postura es que los contenidos son históricos pero expresados en lenguaje literario, no en lenguaje histórico. Ahora bien, entiendo y acepto otras posturas.
En resumen, es imposible tener una visión cristiana del mundo sin comprender los contenidos de estos primeros capítulos del Gran Libro.
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